La Junta de Andalucía ha licitado por cerca de 90 millones de euros (89.983.586) doce nuevos contratos para la conservación, que cubrirán 3.748 kilómetros de carreteras de titularidad autonómicas. Estos lotes abarcan seis provincias andaluzas –Cádiz, Córdoba, Granada, Huelva, Jaén y Sevilla– y tendrán una vigencia de tres años, más una posible prórroga de dos años más.
«La conservación de nuestras carreteras salva vidas y, cuanta mayor inversión, mejor irá a Andalucía para velar por la seguridad vial», ha expuesto la consejera de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda, Rocío Díaz, que ha recordado que los nuevos lotes implicarán un incremento medio del presupuesto del 13% sobre los contratos vigentes, como destaca en una nota de prensa.
Díaz ha señalado, además, que el proceso de renovación se está desarrollando «en tiempo y forma», para evitar la situación a la que el Gobierno de Juanma Moreno «se enfrentó a su llegada a principios de 2019, cuando se encontró la mayoría de estos contratos de conservación de carreteras caducados o a punto de caducar». «La nueva realidad es que ya hemos adjudicado los primeros lotes y que, con esta última licitación, ya hemos movilizado los fondos y los pliegos para renovar dos tercios de los contratos», ha añadido.
Andalucía ha incluido como novedad la revisión ordinaria de precios, conforme a la modificación de la Ley de Contratos del Sector Público. Esta posibilidad, ya recogida con carácter general para los nuevos contratos de servicio, se suma a la revisión excepcional de precios de conservación de 2023, atendiendo a una petición del sector, que había pedido un incremento que compensara la subida de costes de los materiales.
Estos contratos también han introducido mejoras en materia laboral que favorecerán que las empresas hagan frente con garantías a las obligaciones salariales con el personal de los servicios de conservación. Con ello, no sólo se vela por un buen servicio de 24 horas los 365 días al año, sino también por unas condiciones dignas a la plantilla.
Lotes incluidos en la segunda fase
Los lotes incluidos en esta segunda fase garantizarán la vialidad de carreteras de Cádiz (zona Norte con 425 kilómetros y 8,86 millones de euros), Córdoba (zona Sureste, que abarca 297 kilómetros y una inversión de 6,25 millones), Granada (tres contratos para las zonas Noroeste, Oeste y Área Metropolitana-Sierra Nevada que suman un montante de 26,8 millones de euros para 1.002 kilómetros), Huelva (zona Suroeste con 217 kilómetros y 5,39 millones), Jaén (dos contratos para las zonas Norte y Oeste con 813 kilómetros y 16,9 millones) y Sevilla (cuatro lotes para las zonas Este, Norte y Oeste del área metropolitana más la zona Este de la provincia, con 991 kilómetros y más de 20 millones).
Con esta última remesa, ya se habrán renovado dos tercios de los contratos, después de que en las últimas semanas se estén adjudicando los primeros doce contratos, cuyo proceso se inició en enero. Progresivamente se licitarán el resto de los contratos de las ocho provincias hasta alcanzar los 36 lotes que abarcan los más de 10.500 kilómetros de carreteras de titularidad de la Junta.
La red viaria andaluza es la segunda en extensión de todo el territorio nacional. A ello se añade que el porcentaje elevado de vías de gran capacidad, lo que obliga a dedicar más recursos a su conservación. Las labores de conservación son vitales para asegurar que la movilidad por las carreteras andaluzas se realice en condiciones de comodidad y seguridad vial, y conllevan la realización de un conjunto de intervenciones de diversa índole.
Entres esas actuaciones se encuentra la reparación en el pavimento, limpieza y mantenimiento de elementos de drenaje, apoyo al control de maleza en márgenes y poda de medianas en autovías, mantenimiento de la señalización, conservación y reparación de sistemas de balizamiento y defensas. Las operaciones de conservación tienen como misión garantizar que las carreteras se encuentren en condiciones normales de vialidad y seguridad.
Las empresas adjudicatarias realizarán, en primer lugar, todas las actividades y operaciones de ayuda a la vialidad, reparación de elementos dañados y ayuda a la explotación. En este apartado se incluye el mantenimiento de instalaciones generales necesarias para llevar a cabo los servicios de conservación y explotación. Asimismo, mantendrán las vías en condiciones de funcionalidad. Por último, se incluyen actuaciones en circunstancias excepcionales que hagan necesaria la intervención inmediata de los equipos.