Las zambombas de Jerez de la Frontera, catalogadas como Bien de Interés Cultural (BIC) por la Junta de Andalucía desde 2015, ponen este domingo el broche final a un mes de diciembre «histórico». Al coincidir con la Nochebuena se espera que las calles del centro de este municipio gaditano vuelvan a llenarse de vecinos y visitantes dispuestos a entonar sus últimos villancicos dentro de estas celebraciones oficiales.
Aunque el bando municipal establece el periodo oficial de zambombas hasta el 25 de diciembre, la ciudadanía vive el día 24 como el fin de fiesta de esta manifestación cultural y tradicional de Jerez y también del cercano municipio de Arcos de la Frontera.
Durante este domingo, y como viene siendo tradicional en esta localidad, el día de Nochebuena se celebra a ritmo de villancicos populares cantados por todos los que se reúnen alrededor de una candela y al instrumento que da nombre a esta fiesta. Desde el día 1 de diciembre, la localidad jerezana ha acogido más de un centenar de zambombas organizadas por hermandades, asociaciones, entidades sociales y establecimientos de ocio, siendo el puente de diciembre el momento de mayor auge y masificación de esta fiesta tradicional navideña.
Un diciembre «histórico» con «lleno histórico»
A ese respecto, la alcaldesa de Jerez, María José García-Pelayo, valoró esa masiva afluencia en el centro de forma «muy positiva», considerando como «histórico» el puente de la Inmaculada al contar la ciudad con un «lleno técnico» en sus hoteles y por «el importante impacto de promoción» que tuvo este municipio gaditano en redes sociales.
En el lado contrario se encuentra la Asociación de Vecinos del Centro Histórico, que representa a los residentes en intramuros, en el casco histórico de Jerez, y que ha reprochado que las zambombas se hayan convertido en «Magaluf» al verse «masificadas» y generando malestar a los vecinos de la zona debido al ruido, la suciedad y otros problemas.
No obstante, y pese a las opiniones dispares en torno a estos festejos, la ciudad despedirá sus zambombas en la calle y los villancicos pasarán a cantarse en ámbitos más privados durante los encuentros familiares y de amigos que se produzcan durante estos días. La ciudad de Jerez dirá adiós el domingo a unas de sus fiestas más reconocidas de la Navidad y esperando que en 2024 la gente vuelva a vivir y disfrutar con ellas.