Después del devastador terremoto que sacudió Marruecos el pasado sábado, otro sismo, esta vez de magnitud 3.3, fue registrado la noche anterior en la provincia de Jaén, con su epicentro en el municipio de Castillo de Locubín, según ha informado el Centro de Emergencias 112.

En un comunicado publicado en su cuenta en Twitter, se menciona que el terremoto ocurrió a las 23:24 horas y que no se recibieron llamadas de emergencia en el centro de operaciones.

En situaciones de terremotos, el servicio de Emergencias 112 Andalucía recomienda una serie de medidas preventivas para reducir los riesgos y garantizar la seguridad de la población.

En primer lugar, el Teléfono Único de Emergencias aconseja a los ciudadanos mantener la calma y estar atentos a las instrucciones de las autoridades y los organismos que participan en la gestión de la emergencia, las cuales se comunicarán a través de los equipos desplegados en el lugar o a través de los medios de comunicación.

Durante el temblor, se recomienda permanecer en el lugar en el que uno se encuentre, ya sea dentro de un edificio o en la calle, ya que entrar y salir de los edificios puede causar accidentes. Dentro de un edificio, es importante buscar refugio en estructuras sólidas, como una mesa, una cama, debajo de un marco de puerta, junto a un pilar, una pared maestra o en un rincón.

Después del movimiento telúrico, el 112 aconseja salir de los edificios de manera ordenada y gradual utilizando las escaleras y evitar en todo momento el uso de ascensores para evacuar. En caso de encontrarse en exteriores, se sugiere alejarse de cables eléctricos, cornisas, cristales y otros elementos que puedan romperse o desprenderse debido al movimiento.

Si el terremoto sorprende a las personas mientras están en un vehículo, es importante detenerlo de inmediato en un lugar seguro y permanecer en su interior hasta que el temblor haya cesado. Después de la sacudida, se debe verificar si alguien ha resultado herido y prestar ayuda, examinando a las personas cercanas en busca de posibles heridas. El 112 enfatiza que las personas gravemente heridas no deben moverse, a menos que sepan cómo hacerlo o si existe un peligro inminente, como incendios o derrumbamientos.

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