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El paciente de cáncer Justo Márquez, nacido en Granada y con residencia en Nerja (Málaga) durante gran parte de su vida, ha solicitado su ingreso voluntario en prisión para no estar solo. Esta inusual petición se debe a que el propio Márquez considera que sus compañeros en este centro podrían ayudarle y ofrecerle su compañía mientras lucha contra su enfermedad.
Por ello, está llevando a cabo varias protestas en las inmediaciones del recinto, pidiendo que se escuchen sus exigencias. A su vez, en busca de dar visibilidad a su situación, Márquez ha contactado con varios medios, incluyendo Canal Sur, que se ha hecho eco de la situación.
Desde que recibió su diagnóstico, el protagonista de esta historia asegura sentirse desesperado tras buscar ayuda en los servicios sanitarios en repetidas ocasiones. De hecho, comenta que cada vez que pide una solución a esta problemática, los sanitarios que le han atendido solo le recomiendan modificar su tratamiento y visitar a su médico de cabecera.
Antes de ser paciente de cáncer, Justo Márquez ya estuvo en prisión dos años por problemas con las drogas en su adolescencia. En la actualidad, tiene cinco hijos a los que lleva ya meses sin ver, por lo que tampoco ha podido recurrir a ellos para buscar compañía y apoyo en estos momentos.