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Este fin de semana, un incendio en Puerto Real se ha traducido en consecuencias severas sobre la salud de la ciudadanía, el entorno natural y las viviendas de la zona, algunas de las cuales fueron desalojadas preventivamente.
Se ha confirmado, por otra parte, que las llamas se pudieron estabilizar alrededor de las 23:30 horas del pasado domingo:
A este incidente se le suman otros dos en Andalucía, más concretamente en Cartaya y Cortelazor, localidades onubenses. Se trata de una situación a tener en cuenta, especialmente si se suma a la actual escasez de recursos hídricos vitales en intervenciones como estas.
El plan INFOCA, servicio dedicado a la extinción de incendios forestales en territorio andaluz, se ha encargado de estos tres puntos. Ahora bien, han querido subrayar la importancia de la colaboración ciudadana, con incontables habitantes de la zona ayudando a luchar contra el fuego.
Las consecuencias de este incendio en Puerto Real, que ha dejado imágenes verdaderamente impactantes, si bien se destacan las diez personas que precisaron de atención médica urgente por inhalar humo, así como otras cinco heridas por quemaduras.
También se debió iniciar un proceso de desalojamiento de viviendas en el perímetro de Las Canteras, una de las zonas afectadas, que aunque no llegó a traducirse en una evacuación al uso requirió de grandes esfuerzos.
Por último, fue necesario cortar la circulación en la AP-4, que conecta las provincias de Cádiz y Sevilla, afectando al tráfico. El entorno natural de Las Canteras, el más afectado por las llamas, ha sufrido efectos negativos en su flora y fauna tras lo sucedido.