Agustina González fue una conocida y peculiar andaluza, política, escritora y artista, pero también zapatera. Era una mujer independiente, incluso económicamente, algo casi inexistente en aquella época. Se declaraba feminista y católica. También escribió y autofinanció varios libros y se presentó a dos elecciones por el Partido Entero-Humanista. Además, también empezó a interesarse por la teosofía y el espiritismo.
Nació en 1891 en Granada y procedía de una familia acomodada. Estudió en el Real Colegio de Santo Domingo, interesándose desde bien joven por la astronomía y la medicina. Se le permitió leer tras realizar un consejo familiar. Fue un personaje extravagante, y muchos la consideraban como chiflada por sus costumbres y actividades.
Sacó adelante su propia zapatería que se encontraba en la calle Mesones. Además asistía sola a los cafés en donde exponía sus ideas liberadoras. Para evitar la vigilancia estricta, comenzó a vestirse como hombre, al ser descubierta alegó «locura social». Recibió más de una vez terapia al considerarse que sufría histeria. Agustina González fue una mujer insólita, escribía y pintaba y empezó a hacer sesiones de espiritismo y luego dibujaba a los espíritus.
Agustina comenzó a publicar una serie de Opúsculos Filosóficos sobre leyes secretas, que publicaba en su zapatería. También mostró inquietudes políticas y es en su Reglamento Ideario del Entero Humanista Internacional donde anhelaba borrar las fronteras entre países, construir el Palacio de Todos, para dar alojamiento y crear una moneda universal, entre otros.
Conoció al poeta Federico García Lorca, que se sintió inspirado para crear a la protagonista de su obra de teatro La Zapatera Prodigiosa. Agustina, también inspiró al personaje de Amelia en La casa de Bernarda Alba.
Además creó el Partido Entero Humanista y se presentó en las Elecciones generales de España de 1933. El ideario de este partido consistía en una mezcla de contenido esotérico (Entero) y de confianza en el ser humano (Humanismo).
Tras el Golpe de Estado de 1936 fue encarcelada en la cárcel de Torres Bermejas y trasladada al Convento de San Gregorio en el pueblo de Viznar. Finalmente la fusilaron «por puta» junto a otras dos mujeres.
Obras
Estas son algunas de las obras que publicó Agustina González a lo largo de su vida.
- Justificación es una autobiografía en la que explicaba porque se comportaba de una manera que escandalizaba a la gente.
- La eskritura futurista, publicado en 1916. Es un libro en el que utilizaba un idioma propio, y para ello empleaba una escritora fonética.
- Cuando la vida calla y Los prisioneros del espacio son dos obras de teatro.
- Idearíum futurismo donde defiende una simplificación de la ortografía.