El periodista andaluz Antonio Ramos Espejo ha muerto este sábado a los 70 años. El reportero andaluz dirigió Diario de Granada, Córdoba y El Correo de Andalucía y fue autor de más de 20 libros.
Licenciado en Filosofía y en Ciencias de la Información y Premio Extraordinario de la Universidad de Sevilla, inició su carrera en 1967 en el diario ‘Sol de España’ de Málaga, para trasladarse a Roma en 1970 donde se convertiría en delegado de la Agencia EFE, asumiría la corresponsalía de Ya y conocería a Melchor Sáiz-Pardo que facilitaría su incorporación a Ideal a su vuelta a Granada en 1972, donde publicaría amplios reportajes y crónicas sobre la emigración y la cultura andaluza, base de sus primeros libros.
Más tarde vendría su paso por la revista Triunfo, Diario de Granada, primero como subdirector y luego como director, también del diario Córdoba y El Correo de Andalucía y su llegada a la Facultad de Comunicación de Sevilla, donde se doctoró con una tesis sobre Gerald Brenan al que, junto a Federico García Lorca, tuvo una dedicación especial en su obra literaria.
De sus publicaciones destacan, entre otras, ‘Andalucía: campo de trabajo y represión’ (1978), ‘Pasaporte andaluz’ (1981), ‘El caso Almería’ (1982), ‘Después de Casas Viejas’ (1984), ‘De Fuente Obejuna a Marinaleda’ (1985), ‘El cinco a las cinco con Federico’ (1986), ‘Ciega en Granada’ (1990), ‘García Lorca en los dramas del pueblo’ (1998), ‘García Lorca en Córdoba’ (1998), ‘Más lloraron los reyes andaluces’ (2000), ‘Crónica de Gerald Brenan’ (2002), ‘Carlos Cano. Una vida de coplas’ (2004), ‘Entre iguales: un rey y un periodista. Alfonso XII y Seco de Lucena en los terremotos de Andalucía’ (2007), ‘Andalucía de vuelta y media. (Represión, prensa e imagen)’ (2011).
Compromiso con Andalucía
Ramos destacó en su compromiso con Andalucía, especialmente en aspectos como la reivindicación social y cultural; y en el reportaje de investigación histórica, que le permitió rescatar personajes y sucesos de nuestro pasado.
En 2003 fue coordinador de la Enciclopedia de Andalucía y años más tarde, director de la serie televisiva ‘Memoria de la Transición Democrática de Andalucía, 1973-1983’ y del documental ‘Andalucía es su nombre’ que le valdrían en 2007 el Premio Andalucía de Periodismo, en la modalidad Televisión. Un año antes, en 2006, recibiría la Medalla de Andalucía y el Premio 28 de febrero del Parlamento Andaluz ese mismo año. El Ateneo Casablanca lo nombró Socio de Honor en 1989 y la Asociación de la Prensa de Sevilla en 2013.
En 2019 le fue concedido el ‘Pozo de Plata honorífico’ otorgado por el Patronato Federico García Lorca de la Diputación de Granada, en reconocimiento a las investigaciones y difusiones que hizo de la figura del autor de Yerma. El año pasado fue nombrado Hijo Predilecto de Alhama de Granada y se le entregó la Medalla de Oro de la localidad.