El 29 de abril de 1982, hace exactamente 40 años, salía a la calle y a los quioscos de prensa un nuevo periódico en el ámbito periodístico andaluz: Diario 16 Andalucía, que iba a jugar un papel importante en la nueva era política y social de nuestra comunidad autónoma.
Ese día se iniciaba la campaña para las primeras elecciones autonómicas andaluzas y su cabecera, con la bandera blanca y verde como única nota de color, venía a ser un símbolo de esa nueva era. Entre otras cosas, porque, aunque formalmente era la edición regional del Diario 16 nacido en octubre de 1976, era el primer diario de la historia del periodismo andaluz que se editaba en Andalucía y se lograba distribuir en las ocho provincias.
En aquella campaña y en los meses siguientes causó un gran impacto entre la audiencia y la sociedad andaluza porque su propio estilo de redacción, su forma de presentar las noticias e, incluso, por el contenido de sus páginas, presentaban una alternativa nueva, distinta y plena de aire fresco emanado de la campaña de lanzamiento del diario matriz con aquel «Libertad sin ira».
Ante el éxito del nuevo producto, pocos meses después, en octubre de ese año, el Diario16 Andalucía comienza a imprimirse en Sevilla con planta propia, ampliando su redacción y los demás departamentos necesarios como Publicidad y Marketing, a la vez potenciaba las corresponsalías en las ocho provincias y en las ciudades andaluzas más importantes.
El equipo fundacional en Sevilla lo formaron Santiago Sánchez Traver, Paco Correal, Alfonso Domingo, Luis Carlos Peris, Emilio Parejo, Pedro Pons y Rafael Debén. En Málaga estaban Juan de Dios Mellado y Antonio Chaves, y en las demás provincias corresponsales que luego fueron destacados periodistas y directores de medios, como Antonio Torres, Manuel Yélamo, Juan Carlos Téllez, Carlos Funcia, Juan Espejo, Álvaro Vega, Inés Romero…
El lanzamiento de Diario16 Andalucía se hace coincidir con el de Radio16, de la mano de Iñaki Gabilondo y en la emisora andaluza en Sevilla con Paco Lobatón al frente.
Así comenzó esta aventura periodística que, por su singularidad y significado, ha pasado a la historia del periodismo andaluz, aunque, lastrado por las dificultades del periódico matriz nacional, despareciera década y media después, siendo, eso sí, la más exitosa de las ediciones regionales del Diario16, que obligaría a otros diarios como El País a iniciar también el desarrollo de ediciones regionales.
Por todo ello, y cuarenta años después, vaya el recuerdo para aquel proyecto periodístico que unió por vez primera a Andalucía con un medio impreso y que potenció la creación de una generación importante de periodistas andaluces.