Las trabajadoras del hogar, en su mayoría mujeres y con un alto porcentaje de extranjeras, suplen ese vacío con su trabajo ocupándose de las tareas domésticas y de cuidado de menores y personas dependientes. El perfil de la trabajadora del hogar en Andalucía es: el 31% en alta a la Seguridad Social son extranjeras, de las cuales casi el 88% proceden de países fuera de la UE.

Sus condiciones laborales son precarias, se caracterizan por la economía sumergida: sólo un 10,94% de trabajadoras extranjeras afiliadas a la Seguridad Social lo están en el régimen de Empleadas de hogar. Esto indica que muchas extranjeras trabajan en este sector sin estar de alta en la Seguridad Social. El 72.45% de estas trabajadoras tienen contratos temporales, y el 52.88% son contratos a tiempo parcial.

Sólo un 64.19% de las extranjeras afiliadas a este régimen tienen contrato. El resto, pueden estar en paro o de alta sin contrato registrado. En el año 2019, el salario bruto medio total para el personal doméstico es un 56% inferior al salario medio de todas las ramas de actividad, según la Encuesta anual de Población Activa del INE.

A nivel nacional

España concentra el 29,1% del total del empleo doméstico de los países de la Unión Europea
que incluyen este dato en sus estadísticas, únicamente superado por Italia con un 35,3%.

En cuanto al total del empleo en España, el trabajo del personal doméstico suponía el 2,7% del total de empleos de nuestro país, muy por encima de la media de la Unión situada en un 0,9%. Por lo que respecta a las actividades profesionalizadas de cuidados, los 571.100 empleos en estas actividades representan el 3% del total de empleos de España, por debajo de la media
europea del 4,5%.

El empleo como personal doméstico es una actividad feminizada, pero el peso que supone esta actividad con respecto al total del empleo de las mujeres en cada Estado Miembro, está
obviamente relacionado con el volumen del empleo como personal doméstico en el país. En el caso de España el 5,2% del empleo de las mujeres es como personal doméstico.

Según un análisis de UGT Andalucía mediante los datos del INE, desde 2018 ha ido descendiendo el empelo en hogares en ambos sexos. Por lo que respecta a los periodos anteriores al año 2018, todos los trimestres desde el año 2005 a 2010, la ocupación en esta actividad superaba las 700.000 personas, alcanzando un máximo de 780.600 en el tercer trimestre de 2007. Desde 2011 el descenso es continuado, pero afecta en mayor medida a las mujeres que a los hombres

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