El Partido Animalista Pacma ha denunciado que un gato callejero ha denunciado la muerte de un gato callejero envenenado. El felino apareció con una botella pegada con pegamento en su cabeza en la localidad almeriense de Carboneras. Entonces fue rescatado pero «su estado de salud era ya muy grave».
Además, según indica el Pacma, el gato presentaba síntomas de haber sido envenenado. A todo ello, hay que sumar que el animal contaba con «heridas infectadas, abrasiones y carne en estado de putrefacción que dejaba entrever la tráquea». Así, el grupo político ha subrayado que «se reunirá con el Ayuntamiento de Carboneras por el caso».
Persecución para los autores del maltrato del gato envenenado
Los denunciantes ya han avanzado que exigirán al consistorio de la localidad almeriense «mayor implicación para la investigación y persecución de los maltratadores de animales en su próxima reunión». En este caso, se trata de un gato habitante de una colonia felina el que ha sufrido las consecuencias de la «falta de educación y la desprotección sistemática de los animales». El animal había sido visto varios días antes de su captura pero, debido a su carácter no sociable, su rescate se retrasó.
El Partido Animalista también ha remarcado su preocupación por la nueva reforma que se contempla para el Código Penal. Según la cual los maltratadores «tampoco entrarían en prisión ni siquiera en casos en los que las víctimas hubieran fallecido, ya que se prevé un máximo de 24 meses. «Justo el límite para no pisar la cárcel y siendo esta condena sustituible por una multa».