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La directiva sobre conciliación también sufre el fracaso legislativo que acumula el Gobierno de coalición desde hace un año. España va a incumplir una norma que ya estaba generando esperanzas en miles de familias para salvar el verano de la mejor forma posible cuidando de menores y manteniendo las obligaciones profesionales. A partir del 2 de agosto, es decir, del viernes de esta semana, se entrará en incumplimiento deliberado de una norma europea que obliga a retribuir al menos cuatro semanas de las ocho del permiso parental hasta los ocho años.
Aprobada la norma en el ordenamiento jurídico español en forma de Real Decreto-ley que completa la transposición de la Directiva (UE) 2019/1158 que propone, entre otras medidas, reforzar el permiso parental y mejorar las condiciones para ejercer el derecho al régimen de lactancia, más allá de las 16 semanas de permiso por paternidad y maternidad vigentes en la actualidad, el Gobierno falta a su promesa de introducir la retribución de, al menos, cuatro de esas ocho semanas de permiso parental. La causa principal, según recoge EFE, es la congelación de las negociaciones de la Ley de Presupuestos, por lo que su aplicación se retrasará a 2025.
¿En qué consiste la directiva sobre conciliación?
Además de unos mínimos de permisos por nacimiento o cuidados (que todo Estado miembro debe respetar), la directiva establece el derecho de cada trabajador a un permiso parental para ambos progenitores de un total de cuatro meses antes de que el hijo cumpla ocho años. De estos cuatro meses, dos de ellos son intransferibles y retribuidos.
Sumar insiste en que la directiva insta a asegurar un mínimo de 22 semanas de permisos retribuidos, 14 por nacimiento y ocho por cuidados antes de que el menor cumpla ocho años. Hoy en día, en España se contemplan 19 semanas, 16 semanas por nacimiento y tres más por la acumulación del permiso de lactancia, un derecho que, desde el pasado mes, corresponde a todos los trabajadores y no solo a los que lo tenían en convenio.
¿Qué dice el Estatuto de los Trabajadores al respecto?
El Estatuto de los Trabajadores ya contempla tal derecho, pero sin retribución alguna. Sin embargo, la promesa electoral del Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 ha sido, en esta primavera marcada por comicios de todo tipo, la de «retribuir cuatro de las ocho semanas» de dicho permiso que dicta la norma europea. A pesar de ello, en el proyecto de Ley de Familias no hay mención alguna a tal pago. Un proyecto de ley que se aprobó el pasado mes de febrero en el Consejo de Ministros y, teóricamente, se encuentra en tramitación urgente en el Congreso.
Según se indica en Maldita.es, la versión oficial es que la retribución de cuatro de las ocho semanas de este permiso parental «podría incorporarse via enmienda a la Ley de Familias o como Real Decreto en el Consejo de Ministros». Justo lo que no ha podido tener lugar a fecha de 2 de agosto por el descalabre de los presupuestos del Estado para 2024.
La conciliación como un derecho, no como un privilegio
Ésta es una de las reivindicaciones principales de la Asociación Yo No Renuncio liderada por la malagueña Laura Baena, quien el pasado mes de junio trasladó a la secretaría de Estado de Derechos Sociales cuestiones relacionadas como para cuándo la retribución de la mitad de las ocho semanas del nuevo permiso parental, qué ocurre con la ampliación del permiso de maternidad a 20 semanas, o en qué estado se encuentra exactamente la tramitación de la Ley de Familias. Todo ello en pausa hasta 2025. Directiva y conciliación sine die.
Baena, en una entrevista para EnAndaluz.es aseguraba en 2022 que «llevamos siete años luchando por la conciliación. Hemos puesto este problema social, que estaba invisibilizado, en la agenda social y política. Se han dado pasos y hemos conseguido compromisos políticos importantes. Hay que seguir, pero de eso se trata, de ir haciendo camino desde el asociacionismo y de que vayan de la mano las políticas públicas y la concienciación social. Para ello necesitamos más mujeres activistas que se unan a nuestra asociación.