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El debate principal sobre las elecciones europeas a nivel de la Unión se ha centrado entre los diversos candidatos en insistir sobre el mandato de que «hay que frenar a la extrema derecha que ataca los principios y valores de la UE». Reiterada esta premisa con distintos matices entre los cinco aspirantes presentados por el Partido Popular Europeo (Ursula von der Leyen), los Socialistas ( Nicola Schmit), los Liberales Renovar Europa (Sandro Gozi), la Izquierda (Walter Baier) y los Verdes (Terry Reintke), no ha habido grandes propuestas concretas en ninguno de los bloques planteados.
Cabe destacar que los otros dos grupos políticos con representación en el Parlamento Europeo: Conservadores y Reformistas Europeos, e Identidad y Democracia, también fueron invitados a participar en dicho debate. Sin embargo, como declinaron nombrar un candidato principal, no cumplían con los requisitos para intervenir.
Economía y trabajo en las elecciones europeas
Según el último eurobarómetro, la lucha contra la pobreza es una de las mayores preocupaciones de los europeos. En este sentido, todos los candidatos han coincidido al afirmar que es una meta prioritaria de trabajo para la siguiente Comisión, aunque, mientras von der Leyen y subrayaba lo ya avanzado en materia de salario mínimo interprofesional o ayudas para las reformas de las viviendas, la Izquierda se comprometía a atajar el problema de la vivienda en Europa «poniendo techo al alquiler y evitando desahucios».
En cuanto a una posible ampliación de la UE, todos han coincidido en afirmar que están a favor, aunque desde posiciones a veces encontradas. Mientras los Verdes, los Socialistas o la Izquierda reconoce que sin derechos de los trabajadores en una transición verde, «no hay futuro», el PP europeo ha remarcado que se necesitan más recursos propios en la UE para poder «dar respuestas dignas a toda la población actual y futura del continente». Sin embargo, los Liberales indican que es necesaria una reforma institucional para otorgar más competencias a la Unión, como la unión fiscal y de capitales más incisiva.
Defensa y Seguridad
En este punto también ha habido cierta discrepancia. Por un lado, von der Leyen, Schmit y Gozi han explicado que «hay que frenar a Putin que quiere acabar con las libertades de la UE, para lo que hace falta aumentar el gasto en defensa de forma conjunta». Sin embargo, Reitke y Baier sostienen que «hay que revisar el uso de los recursos que tenemos». La Izquierda ha puesto ejemplos concretos recordando que la OTAN tiene un gasto tres veces mayor que lo que dedica a la defensa Rusia o China. Von der Leyen ha continuado con la idea de ampliar los recursos propios de la UE para tener un escudo común europeo «porque no podemos permitirnos que Putin entre en nuestro Parlamento».
Asimismo, el PP ha contestado a la Izquierda haciendo memoria sobre Gaza cuando Baier se ha preguntado por la «barbarie que sufre Palestina» al mencionar la acción humanitaria reforzada para la situación actual. «Solo hay una solución, la distinción y reconocimiento del Estado de Israel y el de Palestina», ha concluido von der Leyen.
Democracia y liderazgo
¿Cuáles serán los pactos para formar mayorías en el Parlamento Europeo? Esa es la gran cuestión en la que el debate ha subido un poco de tono y ha recuperado cierto interés. Todos los candidatos han apelado a von der Leyen a pronunciarse sobre «posibles apoyos» tras los comicios del 9 de junio. «El que esté con la democracia, con el Estado de Derecho y contra Putin será aliado del PP europeo».
Una respuesta que ha sido insuficiente para unos Socialistas, Verdes e Izquierda que se niegan en rotundo a pactar con los grupos de los Conservadores y Reformistas y con Identidad y Democracia. En esta línea, se le ha reprochado a von der Leyen confiar en la presidenta italiana Giorgia Meloni, presente en el acto de Vox celebrado recientemente en Madrid con Milei como invitado de Honor, pero ésta ha defendido el europeísmo de la transalpina confiando en el respeto a su línea roja. Tanto el partido de Meloni ( Hermanos de Italia), como Vox, pertenecen a la familia política de los Conservadores y Reformistas Europeos ausentes en el debate.
Los Liberales, en cambio, prefieren esperar al 10 de junio para empezar a pronunciarse sobre posibles pactos con partidos de extrema derecha (Partido de la Libertad) como el que está a punto de formar gobierno en los Países Bajos de la mano de sus homólogos neerlandeses (VVD).
Cambio climático
Para la campaña de las elecciones europeas no es un tema en el que encuentra competencia von der Leyen, actual presidenta de la Comisión. El PP se ha ceñido a explicar su hoja de ruta para conseguir un continente climáticamente neutro en 2050 y evidenciar que el 40% de los fondos de recuperación Next Generation UE se destinan a luchar contra el cambio climático.
Los Liberales apenas han desarrollado la idea de una economía circular, mientras que Socialistas, Verdes e Izquierdan han hecho hincapié en «un pacto verde sin dejar a nadie atrás con una transición justa para todos los trabajadores».
Innovación y tecnología
Todos los grupos han señalado a la Ley de Servicios Digitales como garante de «la seguridad y el respeto de los derechos fundamentales al tiempo que impulsa la innovación» justo en el mismo mes en el que la Comisión incoa un procedimiento formal contra Meta en virtud del Reglamento de Servicios Digitales en relación con la protección de los menores en Facebook e Instagram.
A todo ello, los Liberales proponen «un euro invertido en cultura, por cada euro invertido en innovación para contar con una población formada», von der Leyen ha tirado de logros como la eliminación de Tik Tok Life por vulnerar derechos de infancia y la Izquierda ha perseverado en el objetivo de evitar todo pacto posible con países «dentro de la UE que se han convertido en fabricantes de bots (programa informático que efectúa automáticamente tareas reiterativas mediante Internet) buscando desestabilizar nuestras democracias».