El Museo de la Autonomía de Andalucía ha acogido una nueva entrega del ciclo «Arquitectos de nuestra Autonomía», una iniciativa que persigue recuperar los testimonios orales de los protagonistas del proceso autonómico andaluz. En esta cita, organizada en el marco del programa de actividades con motivo del 28F, ha participado, Miguel Ángel Arredonda, político andalucista que fue portavoz del PSA en el congreso de los Diputados entre 1979 y 1982.
Ingeniero industrial, nacido en Madrid pero que desarrolló buena parte de su vida profesional y política en Málaga, fue, junto a Alejandro Rojas-Marcos y Luis Uruñuela, uno de los principales ideólogos y motores del Partido Andalucista en los trepidantes años del proceso autonómico andaluz y de la lucha por las libertades democráticas de la Transición.
El director del Centro de Estudios Andaluces, Tristán Pertíñez Blasco, ha sido el encargado de conducir este diálogo con «una de esas personas sin cuyo arrojo Andalucía se habría visto obligada a seguir una senda muy distinta, en lo político, en lo económico y en lo social, en los años clave de la Transición y de la consecución de nuestra autonomía».
«No éramos independentistas»
«Reclamábamos un poder andaluz pero no éramos independentistas», afirmó para recordar los años en los que formó parte del Partido Andalucista, del que se retiró para dedicarse a sus tareas profesionales. Arredonda habló de sus comienzos en el terreno de la política y sus primeros contactos con el movimiento andalucista y con los textos de Blas Infante, «desconocidos para muchos hasta ese momento».
«Fuimos aprendiendo en la oposición», subrayó Miguel Ángel Arredonda, quien destacó la dificultad de hacer política entonces. «En aquel momento nadie quería pertenecer a un partido político fue una labor cuasi personal, de uno en uno; y no es que fuera por miedo, sino porque la gente del único partido del que hablaba y casi que existía, era el partido comunista», aseguró.
El director de la Fundación CENTRA repasó momentos clave como el mitin celebrado el 20 de febrero de 1976 en el sevillano Casino de la Exposición, la manifestación del 4 de diciembre de 1977, el Pacto de Antequera y el referéndum de la Constitución en 1978. Además, le preguntó por las primeras elecciones generales constitucionales del 1 de marzo de 1979, en las que Miguel Ángel Arredonda fue elegido por Málaga como diputado en las Cortes y por su labor como consejero de Medioambiente en el segundo gobierno preautonómico entre 1979 y 1982.
El referéndum y las negaciones
Entre los temas abordados durante su intervención, Arredonda abordó cómo se gestó el referéndum del 28F y cómo se sucedieron las negociaciones tras las condiciones impuestas por el gobierno central tan diferentes a las que se celebraron en Cataluña y País Vasco. El político andalucista recordó como vivió aquellos intensos días. «Estáis poniendo un muro para que Andalucía no pase», sentenció Arredonda sobre el plebiscito, quien además destacó la difícil posición de su partido.
«Éramos un partido andaluz sin tintes nacionalistas ni separatistas, una cuestión compleja ya que parece que si defendías a un pueblo sin pedir la independencia no servía para nada. Los vascos y los catalanes han creado un modelo en el que parece que si no haces lo mismo no sirve de nada», aseguró Arredonda.