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Desde hacía 45 años estaba guardada en una caja de zapatos una cinta 8 milímetros con imágenes inéditas de la manifestación del 4 de diciembre de 1977 en Sevilla. Un documento histórico desconocido y que contiene imágenes nunca vistas como el despliegue de la bandera de Andalucía -la que la familia de Blas Infante entregó a los niños- desde el balcón principal del Ayuntamiento de la capital andaluza.
Esta historia se conoce apenas tres días antes de la efemérides que se celebrará por primera vez como día de la bandera. Ha sido Esperanza Torres, periodista de Canal Sur, quién ha contado la historia del hallazgo. Su padre, José Luis Torres, grabó las imágenes con «su viejo Tomavistas» en cinta de 8 milímetros. «Acudió como miles de andaluces a esa manifestación histórica, pero no recuerdo que nunca las hubiéramos visto en casa», explica Torres. Al morir su padre, entre papeles y recuerdos, apareció una caja de zapatos con varias películas de 8 milímetros que imaginaron que «serían de la familia».
«Hace unos meses decidí que era el momento de descubrir qué había ahí grabado. El técnico fue quien lo advirtió: el material es histórico, hay momentos que no se han visto nunca en vídeo», continúa relatando la periodista andaluza.
Estas imágenes se podrán ver al completo en el programa Despierta Andalucía de Canal Sur porque «porque no se pueden quedar en una caja de zapatos» y «porque la televisión pública es la mejor ventana para difundirla», defiende Esperanza Torres, que añade que «es nuestra memoria y en vísperas del 4D después de 45 años es un gran momento». «Mi padre estaría sorprendido… mis hermanos y yo, también», concluye la periodista.
45 años del 4 de Diciembre de 1977
La evolución del autogobierno andaluz hacia la autonomía y el reconocimiento de la nacionalidad histórica arranca en junio de 1977, con las primeras elecciones democráticas celebradas tras la muerte del dictador Francisco Franco. En octubre, los diputados y senadores elegidos constituyen la Asamblea de Parlamentarios Andaluces, se marca un objetivo principal: lograr el reconocimiento de la autonomía plena.
El trabajo de los representantes políticos se ve respaldado y empujado por una creciente movilización popular, motivada por el ansia de progreso de los andaluces, que no estaban dispuestos a seguir sintiéndose marginados y discriminados.
El 4 de diciembre de 1977, se producen unas manifestaciones masivas, apenas cinco meses después de las elecciones. Son la primera y más contundente prueba de la voluntad popular que los andaluces aportan al gran acuerdo para conseguir la democracia y la libertad en la Transición, tratar de terminar así con la desigualdad y el subdesarrollo.
Se estima que un millón y medio de personas salió ese día a la calles de las principales ciudades andaluzas reclamando progreso e igualdad mientras mostraban la bandera blanca y verde, un símbolo que se popularizó en aquellos años al igual que el himno de Andalucía.
Las movilizaciones también ocurrieron en Barcelona, en Bilbao o en Madrid también de forma multitudinaria, mostrando de este modo un argumento más a las reclamaciones andaluzas. Esto ocurrió porque en 1977 la cifra de andaluces emigrados durante las dos décadas anteriores rozaba los dos millones. Es decir, más de la cuarta parte de la población total de 1955 y con una pérdida anual que llega a los 100.000 entre 1962 y 1977.
Estas cifras son una prueba del rol subalterno de Andalucía que además, durante el franquismo, aumentó los desequilibrios con las regiones ricas.
Asesinato de Manuel José García Caparrós
Volviendo a aquella histórica fecha, lo que parecía una jornada festiva se tornó en trágica por la muerte del malagueño Manuel José García Caparrós. El joven, apenas mayor de edad, trabajador de una fábrica de cerveza y militante de Comisiones Obreras, formaba parte de la manifestación de Málaga. Varios coches de la Policía hicieron acto de presencia para dispersar la concentración y comenzaron a disparar botes de humo y pelotas de goma a los manifestantes; después comenzaron a utilizar sus pistolas reglamentarias con munición real. El resultado: dos heridos de bala (una joven y un chico de 15 años) y la muerte de Manuel José García Caparrós.
Del 4 de diciembre al 28 de febrero
Las organizaciones políticas y sindicales canalizaron las reivindicaciones andaluzas. El 4 de diciembre de 1978, un año de las manifestaciones, once fuerzas políticas firmaron el llamado Pacto de Antequera, por el que se declaraba a Andalucía como «comunidad histórica» y a través del cual se comprometían a conseguir una autonomía de primera para Andalucía. Finalmente y a nivel institucional, se celebró el referéndum del 28 de febrero de 1980 con el fin de iniciar el proceso autonómico siguiendo la vía establecida en la Constitución Española de 1978 (artículo 151), que culminaría en la aprobación del Estatuto de Autonomía el 20 de octubre de 1981.
Este texto define a Andalucía como una nacionalidad histórica constituida como una Comunidad Autónoma dentro del Reino de España, con una bandera, un escudo y un himno propios. La bandera que se estableció fue la misma que se aprobó en la Asamblea de Ronda de 1918: verde, blanca y verde con tres franjas de la misma anchura y con la insignia propuesta por Blas Infante a partir de elementos de la historia y la cultura andaluzas.