El oro líquido, como suele llamársele al aceite de oliva virgen extra, es el producto por excelencia de la dieta mediterránea. Este preciado alimento se extrae del fruto del olivo, a través de un proceso de prensado, y su sabor está estrechamente ligado al lugar de origen de la fruta utilizada.
Andalucía es un referente en la producción de aceite de oliva de calidad, con una tradición de siglos que la respaldan. Los olivos forman parte del paisaje de esta comunidad autónoma, que tiene casi dos millones de hectáreas dedicadas a su cultivo.
El aceite andaluz tiene una cuota de mercado del 22% a nivel internacional y de casi el 80% en el ámbito nacional. Este éxito se debe, entre otras cosas, a la gran variedad de los aceites producidos en tierras andaluzas, con 12 Denominaciones de Origen Protegidas y una Indicación Geográfica Protegida, cada una de ellas con sus peculiaridades distintivas.
En los últimos tiempos la popularidad del aceite virgen extra ha crecido, debido al reconocimiento de los beneficios para la salud que puede ofrecer.
¿Qué contiene el aceite de oliva virgen extra que lo hace tan beneficioso?
El aceite de oliva virgen extra debe su nombre a que es libre de colorantes o conservantes, con lo que mantiene intactos su sabor, propiedades y pureza. Además contiene elementos que contribuyen con la salud, entre los que destacan:
- Grasas monoinsaturadas, insaturadas y Omega 3
- Polifenoles y vitamina E
- Compuesto Oleocanthal
Gracias a estos elementos y a otras propiedades, son múltiples las ventajas de incluir el aceite de oliva en nuestra dieta.
¿Cuáles son los beneficios del consumo de aceite de oliva virgen extra?
El consumo recurrente de aceite de oliva, impacta muy positivamente en la salud de diversas formas, puede ayudarte a:
- Mantener al colesterol a raya, gracias al efecto del Omega 3, que favorece la producción del colesterol bueno (HDL) y reduce el malo (LDL).
- Prevenir riesgos cardiovasculares, ya que los ácidos grasos que contiene, ayudan a reducir la presión arterial y mejorar la circulación.
- Combatir el estreñimiento, reduciendo la secreción ácida gástrica y facilitando la digestión.
- Aliviar dolores articulares o musculares, gracias a sus propiedades anti-inflamatorias.
- Retrasar la aparición del Alzhéimer y de otro tipo de enfermedades mentales (aunque los estudios aún no son concluyentes).
- Mejorar la Diabetes tipo II, debido a que sus grasas contribuyen a regular la producción de insulina y el azúcar en la sangre.
- Reforzar el sistema inmunitario, mediante la aportación de antioxidantes y nutrientes, que aumentan la capacidad defensiva frente a agentes patógenos.
- Retrasar el envejecimiento, por la alta concentración de polifenoles que retrasan la aparición de las arrugas.
- Mantener la salud capilar y de la piel, por sus cualidades de humectante natural.
Hemos podido ver que son múltiples las ventajas de consumir aceite de oliva virgen extra, dentro de nuestra dieta y cómo contribuye a una buena salud.
Si ya estás decidido a incluirlo en tu día a día, conviene que escojas un supermercado de confianza y con un catálogo amplio de este producto, para que puedas elegir la variedad de tu preferencia.