Hoy tenemos el primero de los talleres en el CEPER Tartéside de Camas, Sevilla. Pegada a la capital, Camas es una localidad en la que su CEPER está junto al ayuntamiento y la biblioteca municipal. Puede parecer un dato inservible, pero el emplazamiento de estos centros educativos nos da una idea de la importancia que pueden tener.

A la hora de acordar la realización de los talleres, en Camas no seguimos el protocolo habitual. Lo normal es que toda la comunicación previa al taller sea a través de teléfono o correo electrónico. Sin embargo, a Camas fuimos para hablar con Sofía, una de las profesoras del centro.

Sofía nos dice que la actividad le parece muy adecuada para su alumnado pero quiere estar segura de que estos podrán sacar provecho de la misma. Sofía nos cuenta que “no se trata de realizar un taller por el mero hecho de pasar un par de horas ocupados. Quiero que les sirva de algo y les sea útil”.

Nosotros no tenemos duda alguna sobre la utilidad de que tiene el poder expresar tus ideas, el preguntar sobre las ideas de los demás y poder así comprenderlas, el entender cómo funcionan los medios y qué tratamiento dan a la información dependiendo de la ideología predominante en el mismo…

Hemos hablado mucho sobre los beneficios que tienen estos talleres para los alumnos, pero pensamos que también hemos de resaltar la importancia que tienen para los educadores y formadores.

Entender a los medios de comunicación es entender a los demás y a uno mismo. Al fin y al cabo, los medios son una forma de expresión colectiva aunque también individual. Cada uno de los alumnos que nos acompaña hoy tiene unas ideas distintas a los compañeros que se sientan en su misma fila. Cada medio de comunicación cuenta las cosas de manera distinta.

Sofía, la profesora, también está con nosotros como una más. Aunque lo habitual en el Tartéside sea  ella sea la que enseña, hoy es una alumna. La importancia de este hecho es mucho mayor de la que puede parecer. Con la cantidad de cambios que suceden en la sociedad a diario, es necesario que los formadores dediquen un poco de tiempo a seguir aprendiendo.
Nos encanta y nos parece una gran idea que Sofía se siente con sus alumnos para participar en el taller.

Cuando hablamos con Sofía para programar el taller, discutimos sobre la utilidad que tenía para sus alumnos sin pensar que, a uno u otro nivel, alumnos somos todos.