Hace unos días visitamos Carmona por primera vez en esta edición 2018 y nos llevamos una grata sorpresa por el interés mostrado por los asistentes: muy participativos y dispuestos. Pues parece que las sorpresas no quedan ahí.
Tanto en la edición de 2017 como en lo que llevamos este año, la asistencia femenina es mucho mayor que la masculina. Lo habitual es que los porcentajes queden en torno al 70% de mujeres frente al 30% de hombres, pero ahí están los carmonenses para demostrar que las estadísticas son solo números.
En nuestro segundo taller, la asistencia masculina ha sido abrumadora y, al igual que en el primer taller, de un nivel excepcional.
De casi 20 asistentes, solo una es mujer. Normalmente deberíamos estar preocupados por esta diferencia numérica tan acusada, pero esto es una excepción y una grata sorpresa.
Olvidando a Andalucía
Cuando hablamos de Andalucía, algunos alumnos esbozan una tímida sonrisa, como recordando algo vivido que se había olvidado. Nos olvidamos de que Andalucía fue de las primeras en pedir la autonomía y nos olvidamos también de que se consiguió gracias a un consenso casi absoluto.
Carmona tuvo un papel destacado en la elaboración del Estatuto de Autonomía, pues fue aquí donde se redactaron sus bases.
Desafortunadamente toda aquella ola de sentimiento andalucista (nunca fue separatista) que llevó a la aparición de numerosas revistas y publicaciones a favor de la autonomía, se desinfló. El sentimiento andalucista ha quedado relegado a un plano muy secundario dejando atrás ese orgullo que un día sentimos, al menos en el plano político. Andalucía se siente como pueblo, pero no lo suficiente como para expresarlo en la vertiente política.
Los medios tienen mucho que ver en este asunto. Una de las claves del éxito del proceso autonómico andaluz fue la postura de los medios, apoyando abiertamente la autonomía. Al desaparecer esos medios, el sentimiento también se diluye. No se alimenta constantemente esa idea y terminamos por enterrarla.
No olvidemos que en ese sentimiento está también la preocupación por los problemas de los andaluces. Si no tenemos medios andaluces que se preocupen por las necesidades de su pueblo, es posible tales necesidades nunca lleguen a satisfacerse.
Si queréis conocer cómo nos fue en el primer taller en Carmona, seguid este enlace
Antonio J Reina