Los andaluces tratan de huir de la identidad cultural andaluza para adoptar una identidad neutral, establecida como norma, y que coincide con la del norte de Europa o España. Así lo explicó Javier García Fernández, historiador y profesor de la Universitat Pompeu Fabra de Barcelona en la presentación de su nuevo libro Pensar Jondo. Crítica del eurocentrismo, descolonización y cultura.
Este libro surge a demanda y es «un viaje intelectual que desafía el eurocentrismo y promueve un pensamiento andaluz descolonizador, explorando la historia de Andalucía en el contexto global», como se resume en su portada. La principal idea que aparece y atraviesa toda la obra es la idea de descolonizar Andalucía desde la teoría decolonial latinoamericana. Esta teoría plantea que el colonialismo no es únicamente administrativo, es decir, no se trata exclusivamente de una conquista política y militar, sino que la colonialidad es una manera de visualizar el mundo y habitarlo. Y, por tanto, moldea la forma de pensar de los andaluces.
El autor pone el énfasis en la importancia de pensar como una herramienta política, necesaria, junto con la acción, para transformar las realidades. Se trata de pensar Andalucía desde una identidad colectiva. «Cómo estamos constantemente huyendo de lo que somos, y huyendo de lo que somos colectivamente, y aquello que somos colectivamente está abandonado, nadie se ocupa de pensar el mundo desde lo que somos», explica García Fernández, especialista en estudios poscoloniales y en historia colonial moderna y contemporánea.
Afirma que la configuración y el desarrollo de las Ciencias Sociales está determinado por las dinámicas colonialistas, con el ejemplo de la Historia y desde dónde la estudiamos, siendo necesario «estudiar no en España desde Andalucía, sino estudiar Andalucía». La identidad cultural es otra dimensión que está influenciada por la colonialidad. En Andalucía, explica el autor, se ha producido un esfuerzo históricamente por parte de las instituciones españolas para que los andaluces se identifiquen con la cultura española y la asuman como la ideal y propia, y se sientan parte de España también como pueblo colonizador.
Sin embargo, pensar y reivindicar el fin de la opresión hacia la propia comunidad debe necesariamente ir acompañado de la lucha por la liberación de los otros, y de una reflexión sobre la propia responsabilidad en la opresión a esos otros. Conectar esas dos luchas es lo que trata de explicar como dialéctica de la colonialidad. Como sostiene el autor, «no podemos reivindicar el fin del colonialismo en Andalucía si no se denuncia también en qué medida Andalucía ha sido parte del colonialismo español», porque esto supondría caer en un «nacionalismo blanco que reproduce la opresión».
José Luis de Villar profesor de la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla, manifestó que García Fernández es un autor principal de lo que denomina «tercera ola andalucista». Pastora Filigrana, abogada y defensora de derechos humanos, apuntó además la importante aportación que realiza el historiador «al utilizar la teoría política para explicar las realidades, y no como un dogma» y «entender Andalucía como una colonia bajo los planteamientos de la teoría decolonial latinoamericana». En el debate, García apuntó a la necesidad de profundizar en el estudio de la economía política andaluza y las migraciones forzosas, y Filigrana añadió la importancia de la batalla cultural andalucista planteada más allá del simbolismo.