5500 es la cifra de andaluces sin hogar que han sido atendidos durante la pandemia por Cáritas. Esta acción se ha llevado a cabo a través de cuarenta recursos específicos que se pusieron al servicio de este colectivo: ocho proyectos de atención en calle, dos de atención en asentamientos, siete centros de día, tres centros sociales, un comedor social, diez centros residenciales, seis viviendas, un dispositivo de noche permanente y dos dispositivos de emergencia; contando con un total de 440 plazas y atendiendo a 5.500 personas sin hogar.

Una labor realizada por más de 750 voluntarios, el trabajo de 140 personas contratadas y una inversión económica de 4,25 millones de euros para el mantenimiento de la red de centros, servicios y recursos de atención a las situaciones de sinhogarismo. De estos recursos, un 40% procedía de fondos propios de las distintas Cáritas y un 60% de fondos públicos.

Aunque el perfil es bastante heterogéneo, la organización andaluza identifica el rostro de la persona sin hogar a la que atiende con un hombre español, soltero, de entre 36 y 60 años, con estudios primarios y que casi en la mitad de los casos, lleva más de 5 años viviendo en la calle.

462 atendidos en Sevilla

En Sevilla, 462 personas sin hogar fueron atendidas en 2020. De estas, 419 fueron atendidas a través de cinco proyectos parroquiales de calle, y 43 en Centro Amigo, el recurso residencial de Cáritas que trabaja la recuperación y el desarrollo de habilidades y capacidades para conseguir la inclusión a través de un acompañamiento integral.

Más de 200 voluntarios en los proyectos de calle, 36 en Centro Amigo y 20 técnicos trabajaron para poder desarrollar una labor en la que Cáritas Sevilla invirtió 874.000 euros de los que solo el 30% procedía de fondos públicos. El perfil habitual coincide con el andaluz salvo en el lugar de procedencia, ya que han detectado un aumento de las personas sin hogar procedentes de otras nacionalidades.