El gobierno de Andalucía del Partido Popular y Ciudadanos han propuesto que los presidentes de la Junta de Andalucía reciban una pensión vitalicia. Según ha informado El País, la forma de llevar esto a cabo sería otorgándole a los expresidentes un puesto de consejero permanente por el que recibirían una alta compensación económica.

Esta propuesta ha sido desarrollado por la consejería de la Presidencia que lidera Elías Bendodo, quien ha afirmado que negociará con todos los grupos parlamentarios para «poner en valor» las figuras de los que fueron presidentes de la Junta de Andalucía. «Serán consejeros permanentes, hasta que cumplan 65 años de edad, aquellas personas que hayan desempeñado el cargo de presidente de la Junta de Andalucía. Su nombramiento se efectuará por decreto del Consejo de Gobierno, previa aceptación del interesado», reza el texto del artículo 7 de la Ley del Consejo Consultivo, y es uno de los que Elías Bendodo quiere modificar para eliminar el límite de edad y convertirlo en vitalicio.

Los expresidentes de Andalucía que podrían acceder a esta pensión vitalicia son Rafael Escuredo, José Rodríguez de la Borbolla y Susana Díaz. Los dos presidentes imputados, Griñán y Chaves, quedan fuera de la lista. La presidenta del órgano Consultivo, donde van los expresidentes, cobra al año 69.000 euros. Los consejeros electivos, 68.000 euros y el secretario general recibe 58.000 euros anuales.

Justo en el día de ayer, la expresidenta de la Junta Susana Díaz aceptó su nuevo puesto de trabajo, ser senadora. La exsercretaria del PSOE andaluz, desbancada ahora por el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, representará a Andalucía en la Cámara Alta española, manteniéndose así en la vida política.

Susana Díaz será representante por designación autonómica de Andalucía en el Senado, por lo cual acudirá al pleno parlamentario que se celebrará los días 21 y 22 de julio, en cuyo orden del día será elegida formalmente senadora. La socialista tiene previsto incorporarse a la Cámara Alta en el próximo mes de septiembre.