El andalucismo está de vuelta. Así queda demostrado en los últimos años con el nacimiento de formaciones como Andalucía Por Sí. El partido celebró este sábado su III Congreso Nacional en el que Modesto González, alcalde de Coria del Río con dos mayorías absolutas en el municipio, tomó el relevo a Joaquín Bellido como coordinador nacional.

El proyecto de Modesto González pretende ampliar los éxitos de AxSí ya cosechados a nivel municipal e incluso provincial, y abrir el partido a un espectro político más amplio, para que el andalucismo recupere la posición perdida en los últimos años.

-¿Qué proyecto tiene el partido para Andalucía?

El objetivo es conseguir lo mejor para Andalucía, teniendo en cuenta que llevamos todo este periodo democrático siendo el furgón de cola de España –esto lo arrastramos desde varios siglos atrás-Esta democracia no nos ha permitido converger con el resto del Estado, y con Europa mucho menos. Se trata de poner a Andalucía por encima de cualquier otra cuestión.

Nuestro proyecto va a tener la sostenibilidad, la igualdad y la dignidad económica de nuestro pueblo como ejes fundamentales, para que, de una vez por todas, salgamos de esa lacra de más del 25% de paro.

Asimismo, las infraestructuras de nuestra tierra se antojan esenciales, y en esto no solo la autonomía tiene que participar, también el Estado. Hay infraestructuras claves que llevan décadas esperando a que se desarrollen, como puede ser el tren de Algeciras-Bobadilla, un tren para la conexión del segundo puerto más importante de Europa, y que es pieza clave para el desarrollo de Andalucía.

–¿Qué le llevó a dar el salto de la política municipal a la política autonómica?

Mi compromiso con Andalucía, mi compromiso con mi partido por supuesto, pero especialmente con Andalucía. Soy un firme defensor de esta tierra y creo que los andalucistas, que además somos gente muy luchadora, no tenemos más remedio que implicarnos al máximo en conseguir la mejora de nuestra tierra.

–¿Y a qué achaca que el nacionalismo andaluz no haya contado hasta ahora con un apoyo destacable en la comunidad en los últimos años, a pesar de que gobernó en la Junta?

Las fórmulas políticas nacionalistas que se han planteado hasta ahora al pueblo andaluz no han contado con su respaldo. Esto requiere de un análisis muy profundo. Por eso el PA decidió disolverse. Este es un proyecto totalmente nuevo. No pretende ser un PA dos. Más de la mitad de la militancia nunca ha formado parte de ningún partido político. Con la presencia en el parlamento andaluz no nos vamos a conformar. Queremos ser el referente político de los andaluces. No uno cualquiera, no uno más, sino el referente. Para eso tenemos que crear una fórmula política que pueda contar con la participación mayoritaria de los andaluces.

-¿Qué cree que debe hacerse para cambiar esta situación, para que el andalucismo cobre mayor importancia?

Debemos cumplir las expectativas de los andaluces. Pienso que las fórmulas políticas tradicionales –y en lo de tradicional ya meto a Podemos y Ciudadanos porque al final están funcionando como tales- no están gozando del respaldo de los andaluces. Cada vez se tiene menos confianza hacia la política. Creo que es necesario aportar una nueva fórmula que esté llena de honestidad, de sentido común, plagada de sinceridad, de cercanía hacia el ciudadano, fuera de las trincheras.

–¿Se ve candidato en las próximas elecciones andaluzas o su compromiso sigue siendo Coria del Río?

Ahora mismo soy alcalde y estoy muy implicado con mi pueblo y con mi partido. Con mi pueblo porque las circunstancias que se están atravesando de pandemia hace que tenga que implicarme al máximo, pero además con mi partido en poder desarrollar nuestro proyecto de la mejor manera, de implantarlo de forma mucho más importante en toda Andalucía. Las elecciones vendrán y ya veremos quién es el mejor candidato.

–Muchos antiguos miembros del PA militan ahora en Andalucía Por Sí, entre ellos usted. ¿En qué se diferencia su partido de la formación de la que se le considera heredera? ¿En qué ha evolucionado?

No hemos evolucionado. Es un partido y un proyecto totalmente diferente. Es verdad que yo y muchos militantes fuimos del PA, pero otros están en otros partidos. No reniego del PA en absoluto, porque hizo cosas muy importantes para esta tierra, y ninguno de sus errores tan grave comparado con el resto de partidos que tenemos ahora mismo en el arco parlamentario, y que por contra al PA le supuso la retirada del apoyo por parte de los andaluces.

-¿En qué se diferencian del nuevo proyecto de Teresa Rodríguez, “Andalucía no se rinde”? ¿Ve posibilidades de integración?

Vemos en el movimiento de Teresa Rodríguez una polarización de su mensaje hacia un sector de la población andaluza muy concreto. Entendemos que nuestro partido no va dirigido a ese sector tan concreto. Pretendemos que AxSí mantenga un mensaje mucho más amplio, mucho más abierto y que le permita realmente ser el referente político para los andaluces. No un referente arrinconado en un sector de la política, sino uno donde muchos más andaluces puedan sentirse más cómodos.

–¿Qué deben hacer desde su formación para convertirla en una alternativa electoral?

Tenemos que generar una gran plataforma ciudadana a través de la «Vía Andaluza» que hemos constituido hace unos meses, una gran plataforma ciudadana que finalmente pueda arrastrar a la ciudadanía a la confianza en nuestro partido.

–¿Qué está en juego en las próximas elecciones andaluzas?

No creo que hayan cambiado mucho las circunstancias del gobierno andaluz actual con respecto al del PSOE. Es una política muy continuista. No está en juego la democracia, no está en juego el parlamento andaluz, no está en juego el estado de autonomía de Andalucía. Lo único que está en juego es que pueda haber una forma de gestionar distinta nuestra tierra y eso es lo que nosotros queremos implantar, y queremos hacer ver a los andaluces.

–¿En qué estado diría que se encuentra la comunidad autónoma?

La comunidad autónoma se encuentra en unas circunstancias de carencias muy relevante. La fundamental es el empleo. Hay infraestructuras que no terminan de ponerse en marcha y el mantenimiento de las que tenemos es realmente escaso. Abandono de los servicios públicos. O cambiamos las cosas desde la base o esta autonomía seguirá funcionando por inercia, cambiando de un partido a otro de los ya tradicionales, con menor apoyo y participación ciudadana.

Tenemos que cambiar todas las estructuras desde los sectores económicos. Nuestro sector primario está cada vez más anclado en el pasado. Tenemos que cambiar nuestra agricultura y nuestra ganadería y hacerlas realmente sostenibles, que permitan, además, hacer sostenibles las poblaciones en aquellas zonas donde la despoblación reina más. Tenemos que cambiar nuestra industria, tenemos que hacerla mucho más presente.

Esta tierra es la más rica de todo el estado español, la que más produce, la que más empresas tiene; sin embargo, la mayor parte de ellas no tributan aquí. Si usted va a Euskadi, todas las gasolineras –o prácticamente todas- son de Petronor, que es una filial de Repsol que está afincada en el País Vasco. Todos los tributos de las gasolineras de Repsol se quedan en el País Vasco. Aquí tenemos la mayor refinería de España, que es de Cepsa, que está en el Campo de Gibraltar y que tributa en Madrid. Pues como eso, todo.

La falta de tributación de las empresas andaluzas en Andalucía hace que sea imposible gozar de los recursos que otros territorios poseen para poder desarrollarse a sí misma. Esto es lo principal que tenemos que cambiar, y para ello la participación activa de los andaluces, eliminar en ellos el conformismo, el que estemos dispuestos a cambiar nuestro futuro de una forma activa, se antoja no solamente necesario, sino fundamental.