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La consejera de Desarrollo Educativo y Formación Profesional, María del Carmen Castillo, ha reclamado este martes al Gobierno de España los 112 millones de euros para la creación de nuevas plazas públicas en el primer ciclo de Educación Infantil devueltos por la Junta de Andalucía al entender que esa medida ponía en jaque la supervivencia del sistema andaluz, una red de colaboración público-privada.
«Agradeceríamos muchísimo que devolvieran esos 112 millones a Andalucía. Nosotros los sentimos como nuestros», ha señalado la consejera. «Con o sin el Ministerio de Educación, el año que viene en Andalucía los niños de 2 a 3 años van a tener la atención educativa de manera gratuita, porque era un compromiso del Gobierno y lo vamos a llevar a cabo», ha añadido. También afirmó que ya hay negociaciones con el sector en torno a la viabilidad de la educación gratuita de 0 a 3 años gratuita.
Así lo ha manifestado en una entrevista en Canal Sur Radio: «En Andalucía tenemos un sistema de colaboración público-privada que es un ejemplo. Tenemos el porcentaje más alto de escolarización prácticamente de toda España». Castillo demandó que El Ministerio otorga el dinero exclusivamente para crear plazas. «Si las creamos empezamos a afectar a pequeñas empresas. Estamos hablando de 12.000 personas que están trabajando en esos centros de Educación Infantil», ha alegado.
Asimismo, ha reprochado al Gobierno una actitud «injusta». Según la consejera, a otras comunidades se les habrían permitido «otros modelos». Además, ha defendido que «no es un sistema del PP» sino del «anterior gobierno», añadiendo que «como funciona, merece la pena mantenerlo».
En relación con la ratio, Castillo ha sostenido que Andalucía «no tiene un problema de ratio si nos comparamos con otros sistemas educativos». También ha reivindicado que hay zonas donde se mantienen centros educativos «para que vayan cinco niños al colegio». Refiriéndose a las zonas rurales, ha afirmado que hay una ratio media de un profesor cada seis alumnos. Por otro lado, ha reconocido que «en zonas de expansión, donde hay presión demográfica» sí hay se encuentran «ratios más forzadas» aunque mantuvo que se se encuentran «buscando modelos de refuerzo para que se puedan hacer desdobles».