La Dirección General de Tráfico ha previsto casi un millón y media de desplazamientos en Andalucía este puente del Pilar. La festividad de ámbito nacional del martes 12 de octubre, junto con el fin de semana precedente, dará lugar a un periodo de descanso y ocio comprendido entre el viernes 8 y el martes 12 de octubre. Este periodo festivo propiciará movimientos de vehículos por toda Andalucía y la red viaria española, por lo que la circulación por nuestras carreteras se verá incrementada con desplazamientos en largo y corto recorrido.

Se prevé que, en esta operación especial, por la Comunidad Autónoma de Andalucía se produzcan 1.450.000 desplazamientos de largo recorrido por carretera. Las carreteras que soportarían el mayor número de desplazamientos serían A-92, A-92M, A-45, A-357, MA-20, A-7, AP-7, A-66, A-49, A-4, AP-4, N-4 y, y la red secundaria para el acceso a localidades de playa y montaña.

Distribución de los desplazamientos previstos por provincias en Andalucía

Por ello, la DGT pone en marcha una serie de medidas de regulación, ordenación y vigilancia del tráfico denominadas Operación Especial “El Pilar – 2021”, para dar cobertura a los desplazamientos que se producirán durante estos días, contando para ello con la disponibilidad de sus medios humanos con vistas a facilitar la movilidad y fluidez en las carreteras.

Desde los Centros de Gestión del Tráfico con sede en Málaga y Sevilla, en servicio durante las 24 horas del día, se dará un especial servicio antes, durante y después la operación de este puente del Pilar. Con un total de más de 60 funcionarios y personal técnico especializado que atienden las labores de supervisión, regulación e información.

Se dispone de dos sedes de medios aéreos (helicópteros y drones) que cubren los principales itinerarios utilizados por los vehículos por toda Andalucía en este puente del Pilar. Se centrarán en aquellos puntos donde previsiblemente puedan producirse incidencias. En vuelo se informa del estado de la circulación a los Centros de Gestión del Tráfico y a la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil.

Recomendaciones

El otoño es el periodo del año de transición climática en el que pueden hacer aparición importantes fenómenos meteorológicos adversos y que pueden sorprender en carretera al estar poco habituados a ellos durante el periodo veraniego. Entre ellos se encuentran la lluvia, niebla y el hielo que van anunciando en cierta manera la llegada del invierno.

Otro factor importante a destacar y característico del otoño es el que las noches se alargan, aumentando por tanto los riesgos de accidente al ser la conducción nocturna más peligrosa que la que se realiza por el día. Por ello, para afrontar la conducción durante el otoño en las mejores condiciones de seguridad vial, se tendrán en cuenta una serie de reglas básicas.

Reglas básicas de prevención

Antes de salir de viaje hay que tomar una serie de medidas con vistas a evitar cualquier incidencia previsible en carretera. Entre ellas, poner el vehículo a punto para el otoño por medio de una revisión. También, revisar el buen estado mecánico y especialmente comprobar los frenos, además de comprobar las escobillas y funcionamiento del limpiaparabrisas (durante el verano y debido a las altas temperaturas han podido quedar en mal estado) y comprobar también la luneta térmica.

Asimismo, se debe comprobar el alumbrado del vehículo, antiniebla y sus reglajes y los niveles de líquido de frenos, de aceite y del limpiaparabrisas. Es recomendable limpiar el vehículo, cristales, faros, antiniebla, pilotos, retrovisores y elementos reflectantes
para ver y ser vistos, así como comprobar la presión, dibujo y ranuras (mínimo 1,6 mm) de los neumáticos para asegurar una buena adherencia a la carretera y evitar el deslizamiento.

Desde la DGT hacen hincapié en llevar los recambios imprescindibles como son rueda de repuesto a la presión necesaria y herramientas para su instalación, chaleco reflectante debidamente homologado y dos triángulos homologados de señalización de peligro.

Es aconsejable informase bien antes de realizar el viaje, solicitando información si así fuera necesario, así como las condiciones meteorológicas, llegando incluso a retrasar la salida si estas son adversas.

La prudencia es fundamental, advierten; por ello, si durante el viaje por carretera en este periodo otoñal, apareciesen condiciones meteorológicas desfavorables, hay que tener en cuenta que conducir en esta situación aumenta la tensión nerviosa y la fatiga visual conllevando por tanto una disminución de la atención y siendo causa de riesgo de accidente.