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La consejera de Salud y Consumo, Catalina García, ha admitido que existe «un poco de jaleo» con la obligatoriedad de la mascarilla en Andalucía. Asegura que las medidas «no se han adoptado con unos criterios técnicos lógicos, sensatos y que den credibilidad a los que estamos haciendo». No obstante, la consejera ha insistido en que Andalucía «seguirá las recomendaciones obligadas» del Ministerio de Sanidad. De esta forma, «cuando bajemos de la incidencia durante dos semanas consecutivas la mascarilla no será obligatoria pero sí muy recomendable».
Así se ha pronunciado a preguntas de los periodistas en rueda de prensa en Sevilla, donde ha asegurado que hay confusión porque la instrucción del Ministerio «hablaba, por una parte, de que se eliminaría la obligatoriedad cuando hubiera dos bajadas consecutivas de la incidencia; y, por otro lado, decían que era la ministra la que volvería a quitar la obligatoriedad».
«Como no se ha hecho con criterios técnicos, ahora puede darse la paradoja de que comunidades con 1200 de incidencia (por cada 100.000 habitantes) bajen dos semanas consecutivas, se queden en 800 o 900, y no haya mascarilla obligatoria. Y, sin embargo, en Andalucía, si no bajamos dos semanas consecutivas, con 500 o con 459 de incidencia, como estamos hoy, la mascarilla sea obligatoria», ha explicado.
En cuanto a eliminar la mascarilla en Andalucía, donde se cumplen dos semanas de bajada de la incidencia, García ha indicado que «se van a esperar» porque «los datos son muy volátiles». «La semana que viene podemos estar en 550 o 530. No tendría sentido que ahora dijéramos que la mascarilla no va a ser obligatoria porque confundiríamos a la población», ha expuesto. «Vamos a esperar a ver cómo evoluciona la epidemia en Andalucía, cómo evolucionan los datos y de acuerdo a eso decidiremos», ha concluido la titular de Salud.