No en pocas ocasiones en los talleres de La Prensa en Andaluz hemos mencionado a las llamadas chicas de parrilla (parrilleras o paragüeras) de la Fórmula 1 como ejemplo de la utilización de la mujer como adorno. Estas son las mujeres que se sitúan junto a los vehículos, normalmente sosteniendo un cartel con el número asignado al conductor de dicho vehículo o con un paraguas para evitar que la lluvia o el Sol molesten a los conductores.
El 1 de febrero de este 2018 se anunció que se prescindiría de esta figura, algo que ya se había hecho en otras competiciones de la FIA y en otros deportes, como el Masters de Tenis de Madrid.
Esta práctica era una clara cosificación de la mujer que, según Sean Bratches, director comercial de operaciones de la Fórmula 1: «Aunque la práctica de emplear azafatas ha sido un elemento básico de la Fórmula 1 durante décadas, creemos que esta costumbre no encaja con los valores de nuestra marca. No creemos que la práctica sea apropiada o relevante para la Fórmula 1 y sus aficionados, los antiguos y los nuevos, en todo el mundo».
Ahora habría que poner nuestra atención en algunos programas de televisión en los que la mujer aún tiene este papel de adorno. Suele ocurrir en concursos y programas de entretenimiento, pero también puede aparecer en otras emisiones.
La imagen que los medios dan de la mujer no puede pasar por una imagen en la que a la mujer se le contrata como algo que se puede exhibir. Esto pasa, irremediablemente, por eliminar la figura de las grid girls o pit babes, como se las conoce en los países de habla inglesa.
Aunque en un principio pueda parecer poca cosa, es un paso más para conseguir la igualdad, pero no solo eso, también es una forma de hacer ver que esos deportes en los que se suprime esta figura, son deportes en los que la mujer puede acercarse para disfrutarlo de la misma manera que lo hacen los hombres. Todos salimos ganando.
Os dejamos algunos enlaces en los que se recogía la noticia: